Las excavaciones realizadas por la Autoridad de Antigüedades de Israel en el Parque Nacional de la Ciudad de David han revelado la sección faltante de la muralla de la ciudad de Jerusalén que los babilonios hallaron en la víspera de su destrucción en Tisha Beav (día 9 del mes hebreo de AV), en el 586 A.E.C.

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14 de julio de 2021

(Comunicado de la oficina de prensa de la Autoridad de Antigüedades de Israel)

Según los investigadores, este hallazgo conecta las secciones adicionales de la muralla, que fueron descubiertas hace décadas, y prueba que la ladera oriental de la ciudad de David estaba protegida por una única e impresionante línea de fortificación. Cerca de la muralla, se descubrieron varios hallazgos, como un sello babilónico, una bulla (impresión de sello) con un nombre personal en escritura hebrea antigua, así como vasijas que estaban en uso en la víspera de la destrucción.

Las excavaciones arqueológicas en el Parque Nacional de la Ciudad de David, han sacado a la luz  los restos de la muralla de la ciudad, que fue construida durante la Edad de Hierro-en los tiempos del primer Gran Templo en el Reino de Judá, para proteger a Jerusalén del este.
Las excavaciones son realizadas en el Parque Nacional Ciudad de David en nombre de la Autoridad de Antigüedades de Israel, en colaboración con la Fundación Ciudad de David, como parte del desarrollo del Parque Nacional.

 

           La parte de la muralla descubierta en las excavaciones. Fotografía: Kobi Haraty, Ciudad de David

 

Según los directores de la excavación,  el Dr. Filip Vukosavović del Centro de Investigación de la Antigua Jerusalén y el Dr. Joe Uziel y Ortal Chalaf en representación de  la Autoridad de Antigüedades de Israel: " La muralla de la ciudad protegió a Jerusalén de una serie de ataques durante el reinado de los reyes de Judá, hasta la llegada de los babilonios que lograron destruirla y conquistar la ciudad.

El resto de las ruinas puede ser visto en las excavaciones arqueológicas.
Sin embargo, no todo fue destruido, y partes de las murallas, que protegieron a la ciudad durante décadas y más, permanecen en pie hasta el día de hoy ".

La nueva sección expuesta conecta dos secciones que fueron excavadas previamente en la vertiente oriental.

En la década de 1960, la arqueóloga británica Kathleen Kenyon descubrió una sección de la muralla en la parte norte de la ladera y la fechó en los días del Reino de Judá.

Aproximadamente una década más tarde, el arqueólogo Yigal Shiloh descubrió una larga sección de la pared, en excavaciones en la parte sur de la ladera. A lo largo de los años, se ha afirmado que, a pesar de la impresionante naturaleza de los restos, estas estructuras de piedra remanentes no deberían considerarse como restos de murallas.
Sin embargo, con el descubrimiento de esta nueva sección que conecta con estos descubrimientos anteriores, parece que el debate se ha zanjado, y que ésta era inequívocamente la muralla oriental de la antigua Jerusalén.

La reconstrucción de las secciones que fueron desmanteladas durante las excavaciones anteriores, a principios del siglo XX, permite rastrear casi otros 30 metros de la muralla sobreviviente a una altura de 2,5 metros y una anchura de hasta 5 metros.

En el libro de  Reyes II, capítulo 25, versículo  10, se describe la conquista de la ciudad por los babilonios: "Todo el ejército de los Caldeos  que estaba con el capitán de la guardia imperial derribó las murallas alrededor de Jerusalén".
Sin embargo, parece que los babilonios no destruyeron la muralla oriental, posiblemente debido a la fuerte pendiente de la ladera oriental de la Ciudad de David, que se inclina hacia el Valle de Cedrón en un ángulo de más de 30 grados.

Los hallazgos de la destrucción se pueden ver en el edificio que se alzaba  junto a la muralla  y que quedó al descubierto  durante las excavaciones anteriores: dentro del edificio, se descubrieron filas de frascos de almacenamiento, que se hicieron añicos cuando el edificio se quemó y se derrumbó.

Las jarras llevan asas estampadas  en “roseta”, en forma de rosa, asociadas con los años finales del Reino de Judá. Cerca de la pared, se descubrió un sello babilónico hecho de piedra, que representa una figura de pie frente a los símbolos de los dos dioses babilónicos Marduk y Nabu. No muy lejos de allí se encontró una bulla (una impresión de sello hecha en arcilla) con el  nombre personal judaico "Tsafan".

Los hallazgos de la excavación serán  presentados  el próximo mes de octubre en la conferencia de la Autoridad de Antigüedades de Israel: "Nuevos Estudios en la Arqueología de Jerusalén y su Región".

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