Los icónicos arcos dorados de McDonald's han pasado a ser historia en Rusia. Este domingo ha iniciado la reapertura de los restaurantes en Moscú bajo una nueva imagen y con un nuevo dueño tras meses de permanecer cerrados.
Además de reabrir todos los restaurantes conservando los puestos de trabajo, la nueva administración planea en el futuro expandir la cadena.
También se han comprometido a mantener los estándares de calidad con un menú similar al que estaban acostumbrados sus clientes.
"El nombre cambia, el amor se queda", decía la inscripción en la fachada del local ubicado en la plaza Púshkinskaya de la capital rusa, el mismo lugar donde hace tres décadas abrió por primera vez la cadena estadounidense.
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