Las heridas sufridas por Omran de 4 años lo habían dejado al borde de la muerte.
Hasta el día del accidente, Omran era un niño sano y activo al que le encantaba jugar con sus coches de juguete con su familia.
Sim embargo, hace poco, mientras caminaba con su familia por el costado de la carretera en su aldea en las afueras de Nablus, fue atropellado por un automóvil que iba fuera de control que circulaba a más de 130 kilómetros por hora. Omran fue lanzado 30 metros al aire. Sus padres presenciaron todo el accidente, pero miraron impotentes mientras lo evacuaban rápidamente al hospital más cercano en las cercanías de Jenin.
Allí los equipos médicos lucharon por estabilizar su estado requiriendo múltiples transfusiones de sangre y detectando que había experimentado una compleja y rara fractura en su columna vertebral.
Los médicos de Jenin reconocieron que Omran oscilaba entre la vida y la muerte y que salvar esa vida requeriría la intervención de un equipo experimentado de especialistas en trauma.
Se tomó la decisión de trasladarlo al Centro Médico Shaare Zedek de Jerusalem, donde fue recibido por el equipo de traumatología pediátrica, incluido el Dr. Harel Arzi, Director del Servicio de Médula Espinal Pediátrica.
Según el equipo médico, al momento de la admisión sabían que había sufrido una rara y compleja lesión y que llegó con mínimas posibilidades de recuperación. Sólo se había registrado un pequeño número de casos con tal lesión en un niño tan pequeño.
“La separación completa de las vértebras cervicales con una distancia de dos centímetros entre las secciones representa una lesión extremadamente rara incluso para que el paciente haya sobrevivido”, explica el Dr. Arzi.
“Consultamos con varios expertos en Israel y en el extranjero para diseñar un plan de acción. Ninguno de los expertos se había ocupado nunca de este tipo exacto de lesión y, debido a que es tan raro, el equipo específico para tratar a un niño de este tamaño con tal condición ni siquiera existe".
Después de una revisión exhaustiva de las opciones y en consulta con los principales especialistas internacionales en columna, el equipo decidió realizar un procedimiento con un enfoque dual.
Desde la sección posterior, los cirujanos implantaron un sistema de tipo elástico que se adjuntó a la columna vertebral y la parte delantera se aseguró con dos placas pequeñas que se usan típicamente para asegurar las partes lesionadas de la mandíbula.
“Durante la cirugía, pudimos ver claramente cómo la médula espinal había sido severamente dañada. El procedimiento en sí fue muy bueno y pudimos colocarle un halo-chaleco que asegura la cabeza para mantener la reestructuración interna que habíamos hecho para abordar la lesión.
“Cuando vi a Omran mover las manos, fue un momento muy emotivo”, recuerda el Dr. Arzi. “Las posibilidades de sobrevivir a una lesión tan devastadora son muy bajas, por lo que ver tal movilidad fue muy alentador. Tiene un largo y desafiante camino por delante que incluye extensas terapias respiratorias y ocupacionales.Estoy muy animado de que hayamos podido salvar sus extremidades superiores y espero que su condición siga mejorando".
El padre de Omran, Mohamed agregó, “Nunca me hubiera imaginado que estaríamos donde estamos hoy. Mi único deseo es que podamos aprovechar esta oportunidad de vida y que él siga luchando estamos muy agradecidos con el personal de Shaare Zedek que nos recibió con tanto cuidado y compasión, y por realizar la cirugía que le devolvió la capacidad de moverse a Omran y brinda esperanza de que se recuperará con la ayuda de una rehabilitación intensiva."
Omran fue dado de alta del hospital en condición estable para continuar la rehabilitación y su familia agradeció a Shaare Zedek y a Dios por el increíble milagro que le devolvió la vida a su hijo.
Traducción Carol Broussi
Fuente: Diario Judío.
Shaare Zedek realiza una cirugía de la columna compleja para salvar a un niño árabe
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