Por lo¿En quien confiar?
¿Qué es lo que se puede confiar y qué no?
Pero, finalmente ¿hasta qué punto la Lealtad y la Confianza son factores decisivos para poder sobrevivir?
Estos dilemas han marcado el ser y sentir humanos, desde que se establecieron fronteras, ideologías, lenguajes y diversidades de todo tipo.
Anteponiéndose a todo lo anterior, existe la percepción particular de cada quien, y la manera como se coloca la traición en la escala de valores.
Un hecho muy curioso, es la manera como se trata a las mafias, dependiendo se su lugar de origen.
Desde luego, la que marca todo un abanderamiento de valores, códigos, normas, etiquetas y reglas familiares inviolables, es la italiana.
De ahí, se desprenden (no en orden cronológico), la china, la japonesa, las sudamericanas ¡y hasta la mexicana!
Pero muy por debajo de todo contexto moral, existe la rusa.
Peter y Gail son una pareja de ingleses, quienes se encuentran vacacionando en Marruecos, donde se topan, muy forzadamente, con Dima, de quien no sospechan que es uno de los principales “lava dinero” de la mafia rusa.
A partir de este encuentro, las vidas de la pareja y el ruso cambian radicalmente, puesto que comienzan a salir a flote una serie de “valores” de todo tipo.
La imposibilidad de abandonar la mafia, se alza como el principal obstáculo para enfocar hacia una vida de tranquilidad y fuera de toda perturbación de índole privado y familiar para Dima.
Por supuesto, Peter y Gail comienzan a conocer el porqué de las razones del ruso, y las consecuencias de querer delatar a todo un engranaje de mafiosos rusos e ingleses de “cuello blanco”; quienes gozan de un gran fuero (por así decirlo), dentro del status quo británico.
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Los intereses, la ambición, el anhelo de poder y la búsqueda de la libertad, se conjuntan en toda una maraña de peligrosas situaciones, cuyo común denominador son precisamente la Lealtad y la Confianza, y desde luego la posibilidad de “Un Traidor Entre Nosotros”
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