Para dar marco a temas como el que analizaremos en esta ocasión, es conveniente señalar que, en empresas privadas como en el propio gobierno, los funcionarios que dejan un puesto ejecutivo, no deberían aceptar –“por principios morales”—nombramientos “de alto rango” en otra empresa o área burocrática con propósitos similares, por el riesgo de que esos “sujetos” se conviertan en “soplones” o enemigos potenciales para la correcta dinámica operativa de los organismos donde desempeñaron sus labores profesionales anteriores.
Esta forma de abandonar un alto puesto en el gobierno de México, como ocurrió con el Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, para aceptar un puesto “modesto”, en la coordinación del área jurídica de la candidata a la Presidencia de la República, Claudia Sheinbaum, cumple cabalmente con la advertencia señalada.
Esta acción “se notó muy audaz”, porque Zaldívar abandonó el más alto puesto en el sistema de aplicación de la justicia en México –es uno de los Tres Poderes de la Unión—para ocupar un “puesto equis”, sin ninguna seguridad de alcanzar la titularidad de la “Fiscalía General de la República” u otro puesto de alto rango en el próximo gobierno, en caso de que Claudia Sheinbaum ganara la Presidencia de México.
Los profesionales del periodismo dieron fe de que fue el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, el que “soltó la sopa”, en el sentido de que Arturo Zaldívar conectaba decisiones jurídicas favorables para asuntos “de preferencia del primer mandatario”, con jueces y magistrados. Ahí se descubrieron las verdaderas intenciones para “amarrar hueso en la próxima administración, y seguir en la misma sintonía”.
López Obrador afirmó muy ufano en una de sus pláticas mañaneras con la prensa nacional e internacional, que con el ministro Zaldívar en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se podía hablar “con todo respeto” –así lo afirmó—para “suavizar decisiones”, obviamente con miras de convencer a jueces y magistrados, mediante la recomendación específica de “tratarlo con mucho cuidado”, para favorecer juicios de particular interés para el presidente o de sus múltiples compromisos.
Este conflicto surge a raíz de una denuncia anónima con el franco propósito de que el Poder Judicial iniciara una investigación contra el ministro en retiro y ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, quien es acusado de ejercicio de presiones a jueces y magistrados, a fin de manipularlos en temas resolutivos de diversos asuntos jurídicos recomendados por el “señor que ocupa el Palacio Nacional”.
Entre los asuntos con muchas irregularidades solapados por Zaldívar, deben señalarse la construcción del “Tren Maya”, el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles”, la Ley de Hidrocarburos y la Ley de la Industria Eléctrica Nacional. Y otros relacionados con temas de corrupción en el gobierno, como los casos de Rosario Robles, de Emilio Lozoya con PEMEX, con el ex gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca y la corrupción de SEGALMEX, encabezada con Ignacio Ovalle Fernández.
RESPUESTA DE ARTURO ZALDÍVAR A LA MINISTRA PIÑA HERNÁNDEZ
Arturo Zaldívar, en estrecha coordinación con el partido MORENA, donde está empleado temporalmente, anunció que ha interpuesto diversas denuncias penales y una solicitud de juicio político en contra de Norma Piña Hernández, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
La acusó públicamente de que utiliza al Poder Judicial con “fines políticos”. Obviamente que el tema es eminentemente político. No se trata de “un puesto clandestino de tacos o tortas”. Y añadió que “la Ministra Piña tomó la decisión de intervenir en el proceso electoral”, vigente de ahora y hasta el día de las elecciones generales de 2024.
ZALDÍVAR LANZA ARSENAL LEGAL CONTRA LA MINISTRA NORMA PIÑA
Zaldívar anunció nueve acciones legales contra la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “Una solicitud de juicio político, dos denuncias ante la Fiscalía General de la República y dos ante la FEPADE; una ante el INAI, otra ante el Consejo de la Judicatura Federal y una queja ante el INE.
Aunque en conferencia de prensa dijo no estar en contra de que el Poder Judicial lo investigue, sólo pide que “la indagatoria sea neutral, no política”. Este tema es su gran temor, después de haber sido el Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por más de cuatro años y solamente ministro cerca de diez.
En estas condiciones, la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación, expresó su apoyo a la Ministra Norma Piña Hernández, tras el anuncio de que Zaldívar ha emprendido acciones para un juicio político en su contra.
Fuente:
Dejar una Respuesta