El cineasta inauguró la onceava edición del Festival Internacional de Cine de Monterrey, donde fue homenajeado con el Cabrito de Plata por sus 50 años de trayectoria
Con 50 años de carrera dentro del cine mexicano, el realizador Arturo Ripstein reconoce la oportunidad de contar en prácticamente toda su filmografía con apoyos estatales para el financiamiento de sus películas, cifra que ya supera el medio centenar.
“Desde El castillo de la pureza (1972), todas han obtenido recursos del Estado, mismo que ha financiado el 80 por ciento del cine mexicano con ciertas ambiciones: no comercial y con la mayor calidad posible. Sin estos apoyos no habría trayectoria mía y prácticamente de nadie”, dijo en conferencia de prensa.
Además, enfatizó en la importancia de contar con un respaldo hacia cinematografías emergentes, como la de México, de parte de instancias como el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE). “No existiría el cine mexicano sin este apoyo, no habría opciones y todo el mundo estaría viendoHarry Potter”, agregó.
Desde la Cineteca Nuevo León, el director de filmes como El lugar sin límites (1977) y Cadena perpetua (1978), afirmó que dentro de la cinematografía nacional “ya no hay industria, hay cine de autores”. “De pronto, quienes dan la cara por el cine mexicano son cinco cineastas, pero ya no es dentro de una industria, sino por sus obras”, explicó.
Arturo Ripstein recordó que tanto él como su cine siguen siendo el mismo y que pese al complejo panorama de distribución del cine mexicano, y frente a la “democratización” del cine gracias a las nuevas tecnologías y formas de hacer cine, continuará trabajando como “un demonio”. “Ahora cualquiera puede hacer una película, que salga bien es otra cosa.”
El trabajo y las contribuciones del cineasta fueron reconocidas en el marco de la décimo primera edición del Festival Internacional de Cine de Monterrey, donde se le otorgó el Cabrito de Plata como homenaje mexicano a la trayectoria artística.
Viajará a Venecia
Ripstein se alista para viajar a Italia para presentar su más reciente obra dentro de la 72 Mostra de Cine de Venecia: La calle de la amargura, que cuenta con apoyo del IMCINE, a través del Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad (FOPROCINE), cuya misión es apoyar proyectos considerados de arte y de autor
Esta coproducción entre México y España será vista por primera vez en septiembre dentro del festival, en una proyección de la sección fuera de competencia, dedicada a importantes obras de directores reconocidos en ediciones anteriores del certamen.
En la cinta –cuyo guión es de Paz Alicia Garciadiego–, cuenta con las actuaciones de Patricia Reyes Spíndola, Nora Velázquez, Silvia Pasquel, Arcelia Ramírez, Alejandro Suárez y Alberto Estrella. “Patricia es la actriz con quien más he trabajado. Ella prácticamente inició su carrera en El castillo de la pureza”, recordó el cineasta.
La calle de la amargura, explora el mundo de la lucha libre a través de una historia basada en el asesinato de los luchadores profesionales La Parkita y Espectrito Jr. La película también será vista en el Festival de Cine de Toronto y se espera que pronto ocurra su estreno en México.
Su obra disponible en FilminLatino
Arturo Ripstein, que a los 21 años debutara como director con la cinta Tiempo de morir (1965), tiene una amplia trayectoria que se refleja en más de 50 trabajos cinematográficos, lo mismo en cortometraje, documental y largometraje, entre las que destacan El imperio de la fortuna (1986), Profundo Carmesí (1996) y Las razones del corazón (2011).
En la década de los setenta se consolidó como director y fue una de las etapas más abundantes de su carrera. Ha sido nominado al premio Ariel en numerosas ocasiones y en 2014 fue reconocido con el Ariel de Oro, mismo año en el que recibió de parte del CONACULTA, la Medalla Bellas Artes por su trayectoria.
Convertido en un personaje significativo e importante en el cine mexicano y mundial, Arturo Ripstein ha sido premiado en festivales como Cannes, Venecia, San Sebastián, Moscú, Cartagena, Sundance y Guadalajara, entre otros.
Fue a finales de 2004 cuando el IMCINE puso a la venta Cadena perpetua (1978), como parte de los primeros tres títulos de su acervo en DVD. Actualmente, parte su obra puede revisarse en línea gracias a la plataforma digital FilminLatino, una iniciativa del Instituto.
Algunas cintas disponibles en FilminLatino son: El santo oficio (1973); Lecumberri, el palacio negro (1976); La viuda negra (1977); La perdición de los hombres (2000), y otros de sus clásicos ya mencionados.
Leave a Reply